Día detox con Drink6
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Si me seguís en instagram, sabréis que el pasado jueves tuve la oportunidad de probar los zumos de Drink6.es, una serie de 6 zumos que conforman el plan detox de un día. Los famosos zumos detox. Yo ya había probado en más de una ocasión a hacerlos por mi cuenta en casa. Pero, ¿qué es exactamente un plan detox?
Hacer cleansing es limpiar tu organismo a través de una alimentación sana y equilibrada que ayuda a trabajar mejor a nuestros órganos más implicados en el buen funcionamiento de nuestro cuerpo para eliminar toxinas. Un plan detox NO es una dieta milagro. Puedes llegar a perder algo de peso pero no será una pérdida real.
Yo soy una persona a la que le gusta -bastante- cuidarse y mi objetivo al hacer éste plan de un día era el de ayudar y dar un respiro a mi cuerpo librándolo de carnes y grasas saturadas y consumir las 5 piezas de fruta o verdura necesarias que a veces se me escapan y que un sólo zumo ya contiene. No soy ninguna experta en el tema pero estoy segura de que si seguís una dieta equilibrada, consumís fruta y verdura todos los días, bebéis mucha agua y a todo ésto le sumáis un poco de actividad física, no necesitaréis hacer ningún plan detox. Pero como a mí me gusta probarlo todo, os quiero contar mi experiencia.
¡Si estáis interesados o queréis resolver alguna duda no dudéis en seguir leyendo!
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| Para empezar, creo que lo más importante antes de hacer el plan es mentalizarse. Marcarlo como un objetivo personal, ya que durante un día nos privaremos de alimentos sólidos y sólo consumiremos los zumos en las horas indicadas para cada uno. También hay planes de 3 y 5 días cada mes en los que, además, ayudamos en profundidad al sistema inmunológico, etc. Pero de momento, yo me decanté por el plan de un día. El primer zumo fue uno de los más ricos. Un poco ácido y con sabor afrutado. Buenísimo. Me lo tomé de 7 a 9 de la mañana y me llenó de la energía y ánimo suficiente para continuar con el resto. Los 6 zumos en total contienen las calorías necesarias para un día, por lo que no pasé nada de hambre. Es más el reto mental por no hincarle el diente a nada sólido que el físico. No fue nada duro para mí. A las doce, tras haberme bebido el segundo zumo, ya había ingerido más alimento que cualquier día normal. Sabía a piña y me encantó. A las 13:00 llegaba el más temido, el zumo "verde", compuesto de espinaca, apio, col, lechuga, etc. Vamos, nada apetecible. Me lo bebí enterito y he de confesar que estaba buenísimo! La menta maquillaba completamente el resto de ingredientes y estaba muuuy rico ¡promesa!
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